27.9.06

Ya no me das pena


Era una frase difícil de decir, pero al fin la digo con tranquilidad, YA NO ME DAS PENA. ¿Y sabes porque?, porque sigues siendo la misma persona que miente a todo el mundo, incluso a los que confían en tí y creen que cambiaste. Craso error.
Ya no me das pena.

Solo quiero darte un consejo, quiérete un poco. Que tengas suerte!!!!

22.9.06

18 o Año Nuevo?

Antes del 18 de septiembre ya sabía que mi destino sería la V región como todos los años, ya que las empanadas y las ramadas tienen un sabor diferente a las de Santiago (bueno sólo una vez lo pase acá en Santiago y no me gustó). Ya instalado en Limache –ciudad al interior de Viña del Mar- comenzó mi 18 con mucho asado, chicha, empanadas y harta cueca, porque según yo, un 18 sin un baile de cueca no es 18, pero también fui a la famosa discoteca Pagano en Valparaíso con unos amigos y de entrada me encontré con amigos de carrete cuando yo vivía en Viña del Mar, los abrazos y besos comenzaron en ese momento ya que habían muchos conocidos a los que salude con mucho entusiasmo y agrado que me llevo a pensar por un momento si era el 18 de septiembre o Año Nuevo.

El local estaba horriblemente lleno que no se podía caminar hacia ningún lado, el calor era insoportable, lo cual me hacia preguntar ¿Aun no han solucionado el tema del aire acondicionado?. Pero eso no importaba porque la música no dejaba caída para el calor, si, la música estuvo muy buena porque la gente coreaba los temas de Depeche Mode y Morrisey (que son mis favoritos también), entre otros temas Brit Pop. El show estuvo acorde al momento (18 septiembre) donde se imitó a nuestra Presidenta, Michelle Bachelet, a lo cual el público presente la ovacionó con aplausos y gritos de “Te queremos Michelle”, su performance se basó en canciones picarescas chilenas como La Pirilacha.

En medio de la oscuridad, porque si es oscuro ese local, lo cual le da esa magia de seducción agregándole un par de copas al cuerpo uuuffff, sólo los que han estado ahí pueden entenderme. Nos vimos, si, nos vimos porque ya nos habíamos visto antes pero sin hablarnos, esta vez iba a ser distinto, al menos tenía que saber como se llama, su fono, edad y muchas cosas más, pero lo mas extraño que sin conocernos formalmente, nos encontramos en la barra cobrando un trago y me saludo con un beso en la mejilla y un abrazo, guauuu, es que si estoy en la V región donde la gente sabe expresar sus afectos sin miedo al que dirán, que yo por lo menos deje de temerle hace unos buenos años atrás. Lo demás que paso me lo reservo.

Eran las 05 de la madrugada y decidimos irnos, al salir del local aun había gente afuera sin poder entrar y otros amigos que no había visto hace 2 años, por lo cual seguí con abrazos de “Año Nuevo” y sentía el calor de afecto y cariño de mis amigos como si nos hubiéramos visto el fin de semana pasado y me preguntaba ¿Por qué la gente en Santiago no es así de cariñosa? ¿Por qué es más distante y teme a los afectos de cariño? Espero no cambiar en ese aspecto porque no sabría como saludar a mis amigos sin un cálido abrazo y un reconfortante beso como los de Año Nuevo.